Con la mente puesta en la banca del futuro, Veridas, empresa tecnológica española especializada en identidad digital y biometría, asegura que la biometría se presenta como una herramienta imprescindible para atraer al cliente conectado y garantizar que ninguna persona se quede excluida ante la evolución tecnológica.
Esta tecnología se basa en reconocer a las personas por lo que son, y no por lo que tienen, identificándolas a través de cualidades físicas irreplicables como el rostro y la voz. En una sociedad cada vez más digital, la biometría no sólo simplifica el acceso a los servicios bancarios, sino que también construye procesos seguros y cómodos. Especialmente la de voz representa un puente hacia la banca del futuro. Elimina obstáculos tradicionales y acaba con la obligación de recordar contraseñas.
Para acabar con la brecha digital, la biometría de voz de Veridas permite registrar una huella de voz de manera presencial en la sucursal y facilita que los más mayores puedan interactuar con el personal del banco desde un teléfono fijo o un smartphone. La tecnología de la compañía identifica usuarios independientemente del texto y lenguaje empleados. Además, su sistema de anti spoofing es capaz de detectar voces pregrabadas y avisar ante posibles suplantaciones de identidad.
Inclusión financiera para no dejar a nadie atrás
La necesidad de incluir a las personas mayores en los procesos financieros creció sobre todo a raíz de la pandemia. La Covid-19 acentuó aún más la brecha digital que aleja a estas de la sociedad tecnológica actual. Por ejemplo, en países como México, el proceso de cobro de las pensiones exige a las personas mayores desplazarse a una sucursal bancaria al menos dos veces por año, lo que las situaba en una posición de vulnerabilidad evidente. Entonces, BBVA optó por utilizar la biometría de voz de Veridas para encontrar una solución que mejorase la atención a los mayores de edad, optimizando su seguridad y protegiendo su salud.
Gracias a esta solución, más de 140.000 mexicanos se han registrado -cinco segundos de voz- con una tasa de verificación del 99,9%. Además, sólo se han necesitado 3 segundos para reconocer a una persona, elevando el número de autenticaciones a más de 359.000 ciudadanos y alcanzando una tasa de éxito del 95,2%.
A raíz de este caso de uso, Veridas destaca tres cualidades de la biometría de voz que permiten terminar con la brecha digital e incluir a las personas más mayores:
- Única: eleva el índice de seguridad al autenticar a las personas basándose en sus características vocales únicas e irreplicables. Esto reduce significativamente el riesgo de suplantación de identidad y fraudes, lo que es especialmente importante para proteger a las personas mayores contra las amenazas online.
- Sencilla: elimina la necesidad de recordar contraseñas y las dificultades que pueden tener a la hora de acometer ciertas operaciones. En lugar de introducir contraseñas, el sistema identifica su voz de una manera natural y casi instantánea.
- Accesible: pueden demostrar su identidad desde cualquier ubicación con acceso a un dispositivo con micrófono, como un teléfono -móvil o fijo-. De esta manera, no necesitan acudir personalmente a una oficina para llevar a cabo trámites, mejorando la accesibilidad y velando por la comodidad de estos usuarios.
«La biometría de voz no sólo es clave para cautivar al cliente conectado, sino que impulsa la inclusión de nuestros mayores. Tiene la capacidad de suprimir las barreras tecnológicas y hace que puedan adaptarse a un entorno digital en permanente evolución. Esta es una tecnología fácil de utilizar, segura y plenamente accesible para todos los públicos. Es la solución ideal para no dejar a nadie atrás en este camino hacia la banca del futuro», sostiene Eduardo Azanza, CEO de Veridas.